CRÍTICA DECONSTRUCTIVA

.

Érase una vez un padre, su hijo y su burro, que venían de la dehesa de cuidar del ganado.

En el camino el padre se subió encima del burro mientras el hijo tiraba del animal, cuando se cruzó con ellos una señora que viendo la estampa dijo:

- ¿Pero cómo un padre puede obligar a su hijo a tirar del burro, mientras él va cómodo a lomos de éste? ¡Es vergonzoso que un padre consienta tal cosa!

Ellos dos se miraron avergonzados y se cambiaron los puestos.

Siguieron el camino subido el hijo sobre la bestia y el padre tirando del burro, se cruzaron con un arriero que viendo la estampa dijo:

- ¿Pero cómo un padre puede ir a pie tirando de un burro, teniendo un hijo tan fuerte y joven?, ¡Es vergonzoso que un hijo consienta tal cosa!

Ellos se volvieron a mirar avergonzados, encontrando como única solución a las críticas, ir los dos a pie. 

Continuando el sendero, se les cruzó un peregrino que les dijo:

- ¡Me parece increíble que teniendo un animal de tan buen porte, tengan los amos que ir a pie pudiendo ir a lomos de éste!

El padre y el hijo se volvieron a mirar, sin saber una vez más qué decir al respecto y creyendo entonces que ir los dos a lomos del burro sería una buena idea.

Ya a mitad de camino se cruzó con ellos un cura, que viendo la estampa les dijo:

- ¿No les da vergüenza que un pobre animal tenga que soportar el maltrato de sus amos, teniéndolos que llevar a lomos?

El Conde Lucanor
.

MORALEJA:

Haz lo que creas que es correcto, 

como hagas caso de lo que piensan los demás, 

podrías acabar llevando el burro a hombros.

Es imposible satisfacer a todos en todo momento. 

Hay que saber tomar decisiones 

sin estar pendientes de lo que de ti 
se pensará o dirá. 

No importa lo que los demás opinen de ti, 

lo que realmente importa 

es lo que tú opines de ti mismo.

El Conde Lucanor es el seudónimo del infante Don Juan Manuel, autor del “Libro de los enxiemplos del Conde Lucanor et de Patronio”, original escrito en castellano antiguo y traducido como “Libro de los ejemplos del conde Lucanor y de Patronio”. El libro es en su mayor parte una recopilación de cuentos moralizantes escritos entre 1330 y 1335, y se considera la obra cumbre de la narrativa en prosa del siglo XIV de la literatura española.