ILUSIÓN: DÍCESE...

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Ilusión: Dícese de la esperanza

cuyo cumplimiento

parece especialmente atractivo..

Los niños se caracterizan por recibir las novedades del ambiente con entusiasmo y alegría, disfrutan de las situaciones espontáneas y se muestran impacientes frente a la expectativa del cambio. La ilusión permite disfrutar de cada día con plenitud y entusiasmo, descubrir algo curioso detrás de cada acontecimiento y llenar nuestra vida de nuevos deseos para el futuro. Conforme nos hacemos adultos tenemos menor, poca o ninguna capacidad para ilusionarnos, porque caemos en el error de pensar que nuestra felicidad depende de grandes acontecimientos que casi nunca ocurren. La capacidad de ilusión esta en cada uno de nosotros, en la interpretación que hagamos de nuestra vida y de lo que nos acontece, en como manejamos lo mucho o poco que tenemos, en beneficio propio y de los que nos rodean. Para transformar una ilusión en una realidad, el primer paso es proponerse metas realistas y plantear nuevos propósitos. Pero la felicidad que nos aporta conseguir un propósito depende del efecto que ejerce en nuestro interior. Es aquí donde toma vital importancia, la capacidad de disfrutar de cada momento, sin obsesionarse con el futuro, quitar de nuestra mente pensamientos negativos para dar paso a una actitud positiva, introducir pequeños cambios o alguna novedad en nuestra rutina diaria y ser agradecidos con lo que nos ofrece la vida. Todo supone esfuerzo y mucha fuerza de voluntad. Si no cumplimos con lo propuesto, debemos rectificar sin culparnos. Cristina Barroso (Psicóloga)

. .Vive las cosas

como si fuera la primera vez que las haces,

aprecia y disfruta cada minuto

y cada pequeño detalle de la vida...

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